Es una técnica que se basa en la aplicación de un masaje mediante presión controlada, contínua o alterna. Permite mejorar el drenaje linfático y estimula la circulación sanguínea, permite acelerar la pérdida de volumen y consigue resultados anticelulíticos, antiinflamatorios, diuréticos y vasoconstrictores.
Los principales beneficios de esta terapia destacan la reducción de celulitis, mejora de las venas varicosas, prevención de edemas y piernas cansadas y de todas las patologías relacionadas con el sistema vascular.
Para pacientes que quieren:
- Reducir volumen.
- Mejorar la celulitis.
- Embarazadas (retención de líquidos).
- Deportistas (estimulación y recuperación muscular).
- Gimnasia de mantenimiento (regenerador).
- Obesidad.
- Pre y post liposucción.
- Lipoescultura.
- Pacientes con Menopausia (disminuir la grasa acumulada, a reducir la osteoporosis, además de mejorar la circulación venosa, lo que disminuye el riesgo de trombosis venosa).
Puede durar entre 20 y 50 minutos.
Es un tratamiento muy agradable, sin molestias ni dolor.
Los resultados de la presoterapia se empiezan a apreciar de forma progresiva. Se necesitarán un mínimo de 4 o 5 sesiones para ver importantes mejoras. Un tratamiento completo incluye entre 8 y 12 sesiones de presoterapia, dependiendo de la persona y de la zona a tratar.
Reducir el alcohol, evitar el tabaco, evitar tomar sal en exceso y alimentos que fomenten la retención de líquidos. Realizar una alimentación equilibrada, actividad física regular, mantener las piernas en alto tras las sesiones de presoterapia. Combinar chorros de agua fría y caliente en la ducha.
Se puede combinar con otras técnicas como Mesoterapia Corporal, Carboxiterapia Dioxage, Radiofrecuencia ZIONIC.